Junto a las industrias que generan energía a través de la quema de combustibles fósiles, y los millones de vehículos que por tierra, mar y aire se impulsan usando también ese tipo de combustibles, la ganadería y la producción de carne tienen también un impacto significativo en el cambio climático que está afectando a nuestro planeta. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la ganadería es responsable del 14.5% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero (GEI), lo que la convierte en una de las principales causas del cambio climático. De este tema se ocuparon recientemente unas charlas sobre el cambio climático en Barcelona.
Hay varios factores que contribuyen al impacto de la ganadería en el calentamiento terrestre. En primer lugar, la producción de carne requiere grandes cantidades de recursos naturales, incluyendo tierra, agua y alimentos para animales, lo que conlleva la deforestación, el consumo excesivo de agua y la emisión de gases de efecto invernadero.
Además, la digestión de los rumiantes, como las vacas, produce metano, un gas de efecto invernadero que es 28 veces más potente que el dióxido de carbono. Y estamos hablando de cerca de 1500 millones de cabezas de ganado que hay en el mundo, según la FAO, de los que más de la mitad son de bovino, produciendo metano a diario. Al mismo tiempo, la gestión de estiércol también puede liberar metano y óxido nitroso, otros gases de efecto invernadero.
Por último, la producción de carne requiere grandes cantidades de energía para su procesamiento, transporte y refrigeración, lo que también contribuye a la emisión de los gases que calientan el planeta.
En conclusión, la ganadería tiene un impacto significativo en el cambio climático, por lo que, junto al esfuerzo global por impulsar el uso de las energías renovables, otras acciones dirigidas tanto a reducir el consumo de carne como a promover prácticas de producción sostenibles pueden ayudar también a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mitigar el cambio climático.